Una de las principales preguntas que surgen cuando adquirimos un sistema de paneles solares es: ¿qué tipo de mantenimiento es el que debemos realizar para mantener un sistema funcional y con un alto rendimiento?
Existen marcas de paneles solares en el mercado que ofrecen como características un mantenimiento casi nulo y muy accesible, además con una vida últi de hasta 25 años.
Pero, ¿qué tan cierto puede ser que los equipos tengan una vida útil tan larga, sin mantenimiento constante y trabajando a su máxima capacidad? Es importante que al momento de comparar marcas y precios, tengamos presente el tipo de mantenimiento que deben recibir, ya que este no debe limitarse únicamente a una limpieza superficial, si no que debe ser riguroso y cauteloso.
Existen 2 tipos de mantenimiento: el mantenimiento preventivo y el mantenimiento no preventivo.
El mantenimiento preventivo, se puede ejecutar por un personal no especializado. Un ejemplo claro de esto es la limpieza de las placas solares, en el que se retirará cualquier tipo de suciedad, este se puede realizar con una franela limpia y agua.
El mantenimiento no preventivo es recomendable que se realice por personal calificado, como un instalador solar. Un ejemplo de esto puede ser el mantenimiento de la puesta a tierra de la instalación fotovoltaica. Esto consiste en que cada dos años y en la época en que el terreno esté más seco, se debe medir la resistencia tierra y se tiene que comprobar que no sobrepase el valor prefijado, también se comprobará, mediante inspección visual, el estado frente a la corrosión de la conexión de la barra de puesta a tierra, con la arqueta y la continuidad de la línea que las une.
En solares contamos con el equipo especializado y certificado para dar cualquier tipo de mantenimiento. Ademas nuestros sistemas de monitoreo continuo te permitiran identificar cualquier anomalía dentro de tu sistema fotovoltáico. No dudes en contactarnos.